Puente del Corpus y ahí que nos embarcamos en Mallorca para visitar a dos buenos amigos y de paso bucear, que siempre está bien. El problema de las visitas relámpago que incluyen vuelo y buceo es que no se llevan muy bien por aquello de los cambios de presión y el nitrógeno acumulado en las inmersiones, así que había que calcular bien para aprovechar al máximo.
Según llegamos el jueves, nos fuimos directos al club para hacer la inmersión de las 16:00. El viernes dos por la mañana y el sábado sólo la de las 9:00. Al tener el vuelo el domingo por la mañana, una segunda inmersión habría sido arriesgar demasiado por no respetar las 24 horas sin volar. Con una única inmersión el sábado, el ordenador me marcó 13 horas 40 minutos para poder volar, así que perfecto. El resto del sábado a disfrutar de la isla y los amigos.
El club elegido fue Zoea Mallorca, todo un acierto, tanto por las instalaciones, por el material, los barcos, la cercanía a los puntos de inmersión, amabilidad del personal, etc. Nos llevaron a conocer las reservas naturales de islas Malgrats y El Toro, fantásticas las dos, sobre todo El Toro, ya que lleva más tiempo como reserva y la vida se ha regenerado mucho mejor. Las islas se encuentran en el municipio de Calvià, en frente de la bahía de Santa Ponça.
En la foto siguiente puedes ver las islas abajo a la izquierda. Y el club arriba a la derecha, donde se ve claramente el puerto deportivo.
Las islas Malgrats, están compuestas de dos islotes: el más grande que llaman Es Malgrat, con una longitud aproximada de 2 kilómetros y unos acantilados de más de 60 metros de altura; y otro considerablemente más pequeño al que llaman Ses Rates, des Conills o d’Enmig, con menos de medio kilómetro de largo y 30 metros de alto.
Y por fin la felicidad de después de haber disfrutado de una buena inmersión...
Muy bueno tu blog Juanma, como siempre! muy interesante!
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