Trotamundos Andaluz

Singapur es una ciudad muy cívica, en parte también por el gran número de prohibiciones que existen. Algunas muy conocidas son las de no mascar chicle, no cruzar la calle si no es por los pasos de cebra o, por supuesto, no fumar en lugares públicos o simplemente concurridos. Hay avisos por todos lados.

Prohibido esto, prohibido lo otro...

Hoy nos hemos encontrado una muy curiosa en el metro referida a la prohibición de no llevar durians en el metro.

O la del Jardín Botánico prohibiendo el uso de segway expresamente.
Más adelante comentaré sobre el Speaker córner, que también es curioso.