Día 3. Los grandes de Pekín

A las 8 de la mañana nos dirigimos hacia la Ciudad Prohibida. El otro día trataba de explicarle a un amigo el tamaño de este monumento. Viéndolo en Google, es como del tamaño del centro histórico de Madrid o Sevilla, casi 2km de largo. Como indica su nombre, es una Ciudad.

Entrada a la Ciudad Prohibida, Pekín
Este día tuvimos el primer y único suceso incómodo de todo el viaje. Como los taxis son tan baratos y el metro nos pillaba un poco mal, optamos por el taxi. La bajada de bandera son 10 RMB e incluye 3 kms. Luego pagas por km. El recorrido no debía de ser más de 5 km en casi línea recta. Enseñamos al taxista el nombre en Chino de nuestro destino y una foto de la Ciudad Prohibida, monumento que todo Chino debería saber identificar.
Después de veinte minutos, estaba un poco mosqueado y confirmé con el taxista el destino. Correcto. Ya mosca del todo, traté de identificar como loco los sitios por los que pasábamos y buscarlos en mi pequeño mapa. En el mapa indico el camino sugerido por google maps (desde A hasta B, 5km, 10 minutos), en verde la Ciudad Prohibida y con números rojos y en orden los puntos que identifiqué en el camino. De hecho, al principio, en el punto 2, vi un muro que asemejaba al de la Ciudad y se lo dije a mi novia. Pues hasta el punto 5, son nada más que 12 km.

Me enfadé con el taxista y volví a recordarle el destino. De repente, dio la vuelta y tiró marcha atrás por donde habíamos venido. En cierto momento vimos una boca de metro y aprovechando un semáforo nos bajamos. Según mis cálculos, más de 20 km. Le solté la mitad de lo que marcaba el taxímetro y nos largamos; 45 minutos en el taxi para nada. No volvimos a coger un taxi en muchos días, ninguno más en Pekín.

Moraleja: si coges un taxi, lleva el nombre del destino y la dirección en chino; confirma que el taxista conoce el destino y lo ha entendido; señala en un mapa por donde quieres ir, aunque sea de manera genérica; siéntate en el asiento delantero y no te relajes, ve comprobando continuamente con tu mapa el camino que sigue; si tienes GPS, mejor; si algo te mosquea, haz gestos o di algo, para que se de cuenta de que estás atento; si es una carrera muy larga, pacta el precio antes de subir.

Ciudad Prohibida: este recinto palaciego es sin duda el monumento más espectacular de nuestra visita a China. Es una buena referencia a la hora de orientarte en Pekín, ya que se situa en el centro de la ciudad. La entrada se hace por enfrente la plaza de Tian an Men, justo por el medio, bajo la famosa fotografía de Mao, pasando un puentecito. Parece obvio, pero cuando estás allí, aquello es enorme, está lleno de excursiones de chinos y andar en vano es tontería.
Panorámica de la Ciudad Prohibida

Ciudad Prohibida
  Dedicamos unas 4 horas a ver el palacio; y aún podríamos haber dado alguna vuelta más, pero lo dimos por visto. Hay muchísimas excursiones de chinos, con guías que usan megáfonos y altavoces, por lo que la belleza del recinto se ve estropeada por la multitud. Puedes coger una audioguía, pero no llevábamos dinero suficiente para el depósito y el único cajero automático está en el interior del recinto muy escondido (estuvimos buscándolo hasta que desistimos). Los carteles están en inglés y suelen ser suficientes para saciar la curiosidad.

Estancias dentro de la Ciudad Prohibida
Ya fuera del palacio, decidimos subir a la Tiananmen Gate, también conocida como Gate of Heavenly Peace y acceso sur del recinto; desde la que se tiene una buena vista de la Plaza Tiananmen. Dentro hay poco o nada que ver, salvo algunas pinturas muy bonitas. Hay que pagar una pequeña entrada y dejar las mochilas en una taquilla (que también pagas). Tiempo de visita: 15 minutos, más todo el tiempo de dejar las mochilas y pasar los controles de seguridad (40 minutos).

Plaza Tiananmen: De la Ciudad Prohibida nos fuimos a ver la famosa plaza. Se accede por unos pasos subterraneos, pasando escaners de seguridad. Es un importante símbolo de la ciudad y se utiliza en actos masivos, como los desfiles militares. La plaza es enorme y tiene una serie de monumentos. Alrededor, dos edificios de imponente estilo soviético: el Museo Nacional de Historia y de la Revolución y el Gran Palacio del Pueblo, sede de la Asamblea Popular Nacional.
En la misma plaza, puedes ver el Monumento a los Héroes del Pueblo, el Mausoleo de Mao Zedong y la Puerta de Zhengyangmen. No entramos a ninguno de los mencionados, por lo que en una media hora habíamos hecho las correspondientes fotos y nos pusimos a buscar un sitio donde comer.

Plaza Tiananmen vista desde la Tiananmen Gate de la Ciudad Prohibida
Al sur de la plaza, dirección este-oeste tienes Qianmen East Street, una amplia calle con restaurantes, bancos, etc. Mejor aún, norte-sur, alineado con la Puerta de Zhengyangmen, tienes la calle peatonal del mismo nombre, muy comercial y que ha sido recientemente renovada. La identificarás claramente por el paifan de entrada. Desde la Puerta de Zhengyangmen puedes recorrerla hasta Zhushikou St. que sería la parte bonita. Desde ahí tienes un paseo de una media hora hasta la puerta norte del parque Tiantan Gongyuan, donde está el Templo del Cielo.

Templo del cielo: este templo está situado al sur de la Ciudad Prohibida, a unos cinco kms. El parque es enorme y tiene varios monumentos en el interior que son visitas recomendadas. Personalmente, los monumento no me parecieron ninguna maravilla, pero es una de las visitas obligadas. Lo más interesante a mi parecer es el ambiente del parque, con gente local pasando el tiempo: karaoke, bailes, juegos de cartas, taichi, andando para atrás, etc.
Templo del Cielo

Parque del Templo del Cielo

¡A bailar!
Si no quieres caminar y quieres usar el metro, he aquí el primer error detectado de la Lonely Planet. Para visitar el Templo del Cielo te recomienda las paradas de metro Tian'anmen West o East, que quedan a más de 4 km de la entrada del parque. La linea 5, estación Tiantiandongmen, te deja en la puerta este del parque, que además es la zona más animada del parque.

Hay que pagar entrada al parque y en cada uno de los monumentos del interior, además de 5 RMB si quieres un mapa.

Calle Wangfujing: esta ruidosa y luminosa calle es una de las calles comerciales más famosa de la capital. Personalmente me encantó, todo lleno de carteles luminosos, pantallas enormes y muchas tiendas. Para llegar lo mejor es el metro del mismo nombre en la línea 1 y recorrerla andando hacia el norte. A pocos metros, tienes a la izquierda unos de los famosos mercado de comida, indicado con un paifan, y al final de Qianmen, donde termina la zona peotonal, también a la izquierda, otro, Dong'anmen Street. En estos mercados es donde encuentras para comer escorpiones, estrellas y caballito de mar y demás curiosidades. Curiosamente, a los únicos a los que vi probar estas cosas era a los turistas. Los chinos elegían cosas normales.
Puestos de comida en Calle Wangfujing

Este día fue una auténtica paliza, en especial por el pateo que nos metimos hasta el Templo del Cielo, donde por culpa de la Lonely Planet cometimos un importante sobreesfuerzo.

nulain

Bievenido a mi blog. Espero que te haya gustado esta entrada. Si quieres hacer cualquier comentario o pregunta, utiliza los comentarios o el formulario de contacto. Gracias.

2 comentarios:

  1. Estoy encantada con tu blog! Viajo a China y tu blog me ayuda mucho en cuanto a experiencias y localización o salidas de metro.
    Muchas gracias y enhorabuena!.

    ResponderEliminar
  2. Me alegra que te haya servido, aunque he dejado muchas entradas sin completar :-(

    ResponderEliminar